Queridos amigos y amigas de la Fundación Gadea por la Ciencia,
Con gran pesar debo poner en vuestro conocimiento el fallecimiento de María Teresa Miras Portugal, compañera consejera de la FGC, gran persona de cuya amistad me precio hace muchos años.
Víctima de una penosa y prolongada dolencia, hasta el final mantuvo su amor por la vida y por cuantos la compartieron con ella. Su dedicación por cuanto la rodeaba y por la Ciencia, la universidad, su profesión, sus compañeros, amigos y familia hacen de ella una mujer inolvidable.
Hace solo unos meses, ya enferma y en tratamiento, me escribía: “Ya ves José Antonio, ¡he pasado de explicar bioquímica y neurociencias a ser un ratoncillo de ensayo! Bueno, lo importante es ser útil,” y terminaba “Perdona la disertación, congénita entre el profesorado. Un cordial y cariñoso saludo. María Teresa”
La echaremos de menos, aunque estamos seguros que desde allí donde la haya llevado su último viaje seguirá acompañándonos y bridándonos su amistad y ejemplo.
Descanse en Paz, María Teresa.